La conversación puede llegar hasta la medianoche |
Alegría e iniciativa femenina predominan en la calle donde vivo, con el
compartir de cada día, desde el saludo mañanero hasta el chiste o la frase de ánimo ante
algún contratiempo, porque son ingredientes de la
cotidianidad que aderezan la cubanía.
Varios
años de residencia en Las Tunas lleva Mary Luz Fonseca, esa guantanamera con la
mente siempre abierta a nuevas ideas para la celebración de las fechas del Día
Internacional de la Mujer,
la Federación
de Mujeres Cubanas (FMC) o los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) y también
de otros motivos imprevistos.
No
hay quien se resista al sorteo de cuál plato preparar para cada actividad; pero
no del tamaño común, sino lo más surtido posible para compartirlo mejor entre
todos los presentes, como la pizza familiar que me tocó garantizar el pasado 8
de marzo.
Y
ahí está Lisandra Reyes, tomando experiencia, en su cargo de reciente estreno al
frente de la delegación de la FMC
“Heroínas del Moncada” que integran 33 afiliadas; se le encuentra siempre
dispuesta, cariñosa y atenta, a pesar de sus funciones de joven madre con la
pequeña Jennifer en edad escolar, junto a su esposo Leonardo, ocupado en la
enfermería.
Ese
andar entre una tarea social y otra, no interrumpe el hacer doméstico, y menos
aún los momentos reservados para degustar un buen café, esta vez en casa de
Mary Luz, pues el sentimiento de ayuda mutua es frecuente, y ella agradece sobre
todo la preocupación diaria de la vecina por su estado de salud, al tanto de los
niveles de azúcar, debido al padecimiento de diabetes mellitus.